Si vas a pasar unos días de escapada en Vigo son muchas las cosas que puedes hacer para disfrutar de tu tiempo. Te proponemos algunas alternativas que son prácticamente obligadas si es la primera vez que acudes a esta ciudad del sur de Galicia, famosa por su buen clima y por su estupenda gastronomía.

Una de las visitas obligadas cuando se va a Vigo por primera vez son las Islas Cíes. Estas islas tienen un gran valor ecológico y tienen unas vistas maravillosas. Son espacio protegido y por eso es importante saber, si se quiere ir a las islas cies como llegar.

Lo primero que se necesita es un permiso para poder visitar las islas que se solicita a través de la página de la Xunta. Esto es así porque hay un cupo diario máximo de visitantes y por tanto hay que estar autorizado para entrar. Tras eso, se adquieren los billetes para el barco que lleva hasta allí. En las islas se pueden realizar rutas de senderismo, paseos libres y, en verano, se puede disfrutar de la playa, el mar y del local del camping. Hay barcos a diferentes horas por lo que se puede pasar el día completo en las Cíes o solo la mitad del día. En verano lo normal es alargar la jornada mientras que cuando no es tiempo de playa, medio día suele resultar suficiente.

En Vigo también se puede disfrutar del famoso mercado de A Pedra, que está situado cerca del puerto y en pleno centro. Caminando se llega en cuestión de pocos minutos desde las calles más comerciales y allí es tradicional hacer algunas compras y comer las ostras. Los visitantes se sientan en cualquiera de las mesas de los bares y restaurantes y piden una consumición indicando que además van a querer el servicio para ostras, con lo que les ponen platos y limón. Tras eso, se acercan a uno de los puestos de ostras y compran la cantidad que deseen. Se sirven limpias y ya cortadas, por lo que resultan muy fáciles de consumir. En los restaurantes hay muchos otros platos para comer y picar algo.

La playa de Samil es otro punto obligado de visita. El paseo es muy frecuentado por todo tipo de gente a lo largo de todo el año. Además de disfrutar de una caminata al lado del mar se puede tomar algo en alguna de las terrazas que abren de manera permanente.