Ir de compras con un niño pequeño puede ser toda una odisea. Para comprar cuatro cosas hace falta todo un día entre que se cansa y se quiere sentar, que tiene que ir al baño o que coge un berrinche porque se ha empeñado en algo que ha visto en un escaparate. Incluso los niños más buenos pueden hacer que los padres pierdan la paciencia.

Por eso, comprar desde casa es una de las mejores opciones para no tener que pasar por todo eso. El niño puede jugar en su cuarto y mientras los papis escogen qué necesita para empezar en el cole, por ejemplo en una zapatería niños online.

Online puedes comprar de todo, desde la ropa para ir al cole y el calzado hasta el material del cole. Y todo rápidamente, con comodidad y mientras estás en tu sofá tomando algo con tu pareja. No se puede pedir más. Como además puedes ir guardando las cosas en la cesta y comprobar el precio del total antes de pagar, si te has pasado del presupuesto puedes realizar cambios, por lo que no habrá sorpresas de última hora ni gastos imprevistos.

Escoge tiendas en las que haya diversas formas de pago para poder abonar tus compras siempre de modo seguro. Y asegúrate de que puedes realizar devoluciones. Lo mejor es que te devuelvan el dinero porque así comprarás donde te parezca mejor, pero si te dan un vale y se trata de una tienda en la que hay una gran variedad de cosas para tu hijo tampoco es una mala opción.

Para el niño puede ser muy emocionante recibir los paquetes y abrirlos descubriendo en el interior su ropita y sus cosas del cole. Es una buena manera de prepararlo para empezar esta etapa, o incluso el nuevo curso, con una actitud muy positiva ya que podrá estrenar todos esos “regalos” que está recibiendo día tras día.

Si tu hijo es de los que odian ir de compras, entrar en los probadores y pasarse horas de tiendas, de esta manera tendrá un enfoque mucho más divertido de las compras y probarse la ropa en casa no le costará tanto trabajo. Y, desde luego, para los padres será todo un descanso. De este modo, las tardes libres podrán ocuparse en actividades mucho más gratificantes para toda la familia que el ir de compras.