Vitaminas para sobrellevar la primavera

Mientras que para algunas personas la llegada de la primavera supone una inyección de energía gracias a la acción del sol, para otras es todo lo contrario. Los periodos de entretiempo, como la primavera y el otoño, son famosos por el efecto que causan en gran parte de la población. Mientras que en el otoño es frecuente sentirse un poco deprimidos por el fin de las vacaciones, del buen tiempo y la llegada de los días más cortos, en primavera aparece un síndrome que ya se conoce como astenia primaveral.

La astenia primaveral se caracteriza por un cansancio que no está justificado con un incremento de la actividad y que puede venir acompañado de otros síntomas. El cualquier caso, siempre tiene un carácter leve. Normalmente, se controla bien cuidando la alimentación y tomando algún suplemento vitamínico de los que se pueden comprar en cualquier parafarmacia.

Las horas de luz solar influyen en el organismo de todos los animales. Tienen una incidencia directa en la producción de hormonas. Un buen ejemplo es la entrada en celo de diferentes especies animales a partir del mes de enero, justo después de superar el solsticio de invierno. De este modo, los cachorros nacerán entrada ya la primavera, con el buen tiempo y en las condiciones más óptimas para sobrevivir.

Los seres humanos somos animales y aunque no tenemos periodos de celo nuestra producción hormonal también se ve afectada por la luz solar. Este pequeño reajuste es lo que hace que algunos se sientan tan cansados en primavera. Pero una vez que el cuerpo se ha vuelto a adaptar a la situación, todo se equilibra y vuelve a la normalidad.

Normalmente, la astenia primaveral afecta más a aquellas personas que además son alérgicas ya que  el consumo de antihistamínicos puede hacer que el cansancio y el sueño sean más intensos, haciendo que la persona tenga incluso que tomarse unos días de baja laboral por este problema.

A parte de los suplementos alimenticios no suele darse otro tratamiento para este problema a no ser que los síntomas se compliquen. En estos casos podría estar ocultando algún problema de salud más serio. Si el cansancio se prolongara o fuera muy exagerado, no está de más acudir al médico para que nos realice un chequeo general y una analítica para comprobar que todo está perfectamente y que no tenemos ningún problema de salud que pueda estar generando ese agotamiento.