¿Cuándo debo hacer un seguro de decesos?

Algunas personas hacen un seguro de decesos cuando se casan y ya incluyen a sus hijos nada más nacer. Estos, de adultos, pueden optar por quedarse o por irse a su propio seguro cuando fundan su familia o se independizan.

Otras personas, prefieren no pensar en un seguro de decesos hasta que ya tienen cierta edad y, por último, están los que prefieren dejar un dinero en efectivo y no estar toda la vida pagando por su entierro.

Todas las opciones tienen sus pros y también sus contras. Lo cierto es que no importa demasiado cuándo comienzas a pagar el seguro de vida, ya que si comienzas muy joven vas a pagar muy poca cuota mensual y, en el momento en que tengan que hacer uso del mismo, habrá dinero suficiente para cubrir cualquier gasto. Si se comienza más tarde, se podrá tener lo mismo pagando una cuota mayor.

Hay quién decide cambiar su seguro porque prefiere tener al mejor seguro de decesos y no conformarse con el que le escogieron sus padres, por ejemplo. Esto suele ser una buena opción ya que el dinero que se ha pagado normalmente no se pierde. O bien se traspasa el capital para un nuevo seguro o bien el dinero queda disponible para el resto de titulares.

Por tanto, el momento en el que se contrate el seguro no es lo más importante, aunque siempre se recomienda que se haga pronto, ya que nunca se sabe cuándo puede hacer falta. Además, el pagar una cuota menor es un buen aliciente para hacerlo incluso cuando pensamos que pueden faltar muchísimos años para utilizarlo. Y no hay que ser supersticioso al respecto, ya que se trata de un seguro más, como cuando contratamos uno de hogar y no pensamos que con eso atraemos los accidentes en casa.

Los que prefieren dejar dinero y no contratar un seguro, cuentan con la ventaja de que pueden dejar todo organizado a su manera. Pero para quienes tengan que llevar a cabo estos deseos será un trabajo que les vendrá en un momento en el que, posiblemente, no tengan mucho humor para llevarlo a cabo ya que tendrán que informarse sobre funerarias, ir a contratar los servicios etc. Mientras que cuando ya se cuenta con un seguro, solo hay que llamarlos para que se encarguen de todo y se pueda pasar el duelo sin tener que preocuparse prácticamente por nada.