Este verano, no olvides tu power bank

Este verano, en tu maleta, no puede faltar uno de esos Power bank baratos que pueden sacarte de cualquier apuro. Las baterías portátiles son los complementos fundamentales de los teléfonos actuales. Aunque las baterías de los teléfonos inteligentes han mejorado mucho y duran horas y horas, en verano les damos mucha caña y raro es que aguanten todo el día.

Cuando vamos a la playa, muchos han cambiado el libro por la pantalla de su teléfono y no dudan en leer novelas en este. Pero tampoco en poner música o escuchar la radio. Los que tienen un sistema de televisión de pago y muchos datos, aprovechan incluso para ver el capítulo de su serie favorita mientras disfrutan del sol tras un chapuzón.

Y a todo esto hay que sumarle los WhatsApp con vídeo para que todo el mundo se muera de envidia al verte en la playa o las videoconferencias para saludar a la familia y a los que se han quedado en la ciudad. Y también el uso del navegador para encontrar esa cala idílica a la que fue un amigo el año pasado y de la que te ha enviado la localización para que este año, sin falta, te pases.

Lógicamente, tras este uso y abuso del teléfono, puedes encontrarte con que a mitad de la tarde tu teléfono ya no tenga batería. Y eso es un problema ya que hemos visto que es una fuente de entretenimiento constante. Por suerte, con una power bank solo tendrás que enchufarlo a ella y volverás a tener teléfono para rato.

Al llegar a casa por la noche no te olvides de volverla a cargar para tenerla lista para el día siguiente. Así, tendrás el doble de carga y no tendrás que estar midiendo el uso que haces de tu teléfono ni preocupándote de si puedes parar en algún lugar que tenga enchufe para recargarlo y continuar tu camino.

Las hay de diferentes capacidades, pero es muy recomendable comprar una que tenga suficiente para poder usar el teléfono tal y como haces normalmente. Estas baterías no ocupan mucho, en ocasiones como una barra de labios o como la batería normal de teléfono. Y te van a sacar de muchos apuros porque en la playa hay muchas cosas que tus amigos van a envidiar, pero no hay enchufes.